Sin importar dónde trabajemos o qué hagamos, todos queremos ser más productivos, especialmente en esta era digital, en la que contamos con tantas distracciones. La productividad no consiste en tachar más tareas de tu «lista de cosas por hacer». De hecho, las personas verdaderamente productivas no buscan hacer más cosas, sino menos.
Las personas productivas
El experto en productividad y dirección de proyectos Tony Wong comparte los hábitos que debemos incorporar en nuestro día de trabajo:
1. Recorta tu lista «por-hacer» a la mitad
No se trata de hacer tanto como sea posible en 8 horas. En lugar de tener 30 tareas pendientes, enfócate en completar las que realmente importan.
2. Toma más descansos
Tras varias horas de trabajo tu cerebro ya ha utilizado toda la glucosa y es hora de refrescarlo con un paseo, una merienda o una breve desconexión. Luego regresarás recargado y listo para lograr mayor eficiencia.
3. Sigue la regla 80/20
El 20% de lo que hagas en el día produce el 80% de los resultados. Elimina aquello que no te importe mucho y que tenga efecto mínimo en tu productividad. Descompón tu próximo proyecto en pasos pequeños y remueve sistemáticamente hasta que consigas el 20% adecuado.
4. Aprovecha la mañana para enfocarte en ti mismo
Arrancar la mañana revisando el e-mail y el calendario destruye la productividad. Esto permite que otros dicten lo que tú vas a lograr. Comienza mejor con un buen desayuno, leyendo las noticias, meditando o hacienda ejercicio.
5. Ataca tus tareas difíciles antes de almuerzo
Hazlas mientras tu cerebro esté fresco. Si tienes trabajo pesado o reuniones, déjalo para la tarde. Es una forma más productiva de manejar el tiempo.
6. Mejora tu relación con el e-mail
El e-mail es un asesino de la productividad, una distracción para las áreas que realmente importan. No caigas en la trampa del e-mail, no te dejes distraer. Si una conversación por e-mail ya lleva más de dos «respuestas» es hora de llamar por teléfono. Puedes aprender a manejar tu bandeja de entrada.
7. Crea un sistema
Seguramente has desarrollado con los años algunos hábitos que destruyen la productividad. Para compensarlos, establece un Sistema que mantenga alejadas las distracciones. Por ejemplo, si revisas el e-mail compulsivamente planifica administrar tu bandeja de entrada un rato en la mañana y otro en la tarde.
8. Deja de confundir productividad con flojera
Aunque nadie lo reconozca, la flojera es la causa número uno de la pérdida de productividad. De hecho, muchos de los métodos de ahorro de tiempo son técnicas para evitarte hacer trabajo improductivo. Enfócate en hacer las cosas que realmente importan en forma eficiente y efectiva. Descubre la diferencia entre eficacia y eficiencia.
9. Para de hacer múltiples tareas a la vez
Deja de intentar hacer 10 de las tareas a la vez. Cambiar de tarea 10 veces al día disminuye el coeficiente intelectual en 10 puntos promedio. Sé realmente eficiente y efectivo enfocándote en una tarea cada vez.
Recuerda que menos es más cuando se trata de productividad.
Vía: Soy Digital